lunes, 1 de junio de 2009

POP

















A todo el mundo le ha dado por decirme POP,
Como si no hubiera cosas peores que ser POP!
El sábado fui al Primavera Sound “el de verdad” porque es en mitad de un parque-parque (Joan Miró)
El Forum no es un parque, puede ser un descampado, un muelle, un anfiteatro pero parque no. Y era por el día. No relaciono noche con primavera. Puede ser primavera y ser de noche pero mi cabeza no asocia las dos palabras juntas.
Fui al minimúsica para niños. Minimúsica y niño encaja muy bien conmigo.
El escenario era precioso. No tenia nada y eso lo hacia excepcional. Colgando un cartel y banderines sin banderas. Era como una ilustración de cuentos para niños anglosajón, esas que se organizan en un barrio bien o en un jardín de casita Disney, que yo siempre pensaba dónde coño pasará todo eso. A mi barrio no se parecían. Se me hacía más verosímil la casa de chocolate de Hansel y Gretel que una urbanización Wisteria Lane.
Vi a Nito Niko.
Me acabo de enterar que Kiko Niko es un oso de Imaginarium, alguno pondrá el grito en el cielo. Sonaba a ratos a Parade, alguno pondrá dos gritos en el cielo.
A los niños les dieron unas “cosas” (carracas?) preciosas para hacer ruido. Ganas me dieron de decir “trae para acá eso” pero había muchos papás.
La cumbre vino cuando un cantante explicando la canción, a los niños, que iba del Big Bang, les dijo que el origen del universo fue una explosión. Ante la cara de los niños dijo “bueno los cristianos tienen otra explicación más misteriosa y rara”. Como historia me quedo con la de los cristianos. Se está perdiendo el misterio de las cosas. A mí con tres años me explicas un parto y de la misma la palmo.
Había montón de cochecitos. Vaya cara la de los padres. Me dirás que van al parque para que el niño vea el concierto.
N llegó en la última canción pero dio lo mismo porque había otro escenario. El escenario estaba al lado de una pista de futbito para papás domingueros, ¿se puede pedir más?
Pues si, guiris con tapones en los oídos, capucha , gafas de sol y dándose crema protectora... lo q se dice: festival festival. Después de dos birras me largué corriendo a por una sangría, por no desentonar, más que nada.
El primer grupo era como de Folk. A mi el Folk y el jazz no me llaman mucho, estoy más por revisar la Jota y la Zarzuela. Después vino un grupo guay, que será famosísimo. La tía no paraba de saltar y gritar. Chillaba tipo Björk pero parecía un grupo punk chino. Hay que ser artista para pegar esos gritos a esas horas sin haberte metido un tripy.
Después seguimos la música comiendo en una terraza, rodeada de palmeras, papagayos, gays de gimnasio. Entre una plaza de toros y un palote de Miró.
Barcelona es chiflante.

Aclaración-nota de autor-haciendo amigos
Nunca fui un chico primavera, siempre fui un chico Sonar, sonajero.
El primavera siempre me pareció festival de gafa pasta empollón. La cosa empeoró cuando en un día primavera en el trayecto del aeropuerto a la ciudad, petao de primaveras, se quedó tirado el tren de cercanías dos horas, dos horas en mitad de la nada y encerrados. Desde aquí un recuerdo especial a Magdalena Alvarez y al PSOE en estas fechas tan especiales. La máxima preocupación del vagón (en dos horas) fue si un cantante peinaba flequillo a la derecha o a la izquierda. Ahí es fue cuando empezar a sospechar que nunca seria catalán ni primavera.

1 comentario:

  1. eres demasiado del noroeste peninsular, cariññooosssss! parece divertido lo q cuentas...eso sí, hayq reconocer q pa seguirte en este texto hay q luchar demasiado contra la corriente y contra la sintaxis.

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